miércoles, diciembre 02, 2009

Sacha


Los amores de juventud son difíciles de olvidar y siempre nos acompañarán en nuestra vida de adulto. Pese a que la relación con la pareja Dupuy-Berberian se haya enfriado en lo últimos tiempos y obras como Boboland, Un poco antes de la fortuna o especialmente los últimos Sr Jean no despierten ya la chispa de la pasión de la misma manera que los primeros Jean o Diario de un album lo hicieron en su momento, la verdad es que el cariño todavía sigue ahí.

Con esta predisposición parto en la lectura de Sacha, la última propuesta (aunque también podríamos decir la primera) de Charles Berberian. Una obra realizada sin su dupla habitual, pero que a primera vista podríamos definir de continuista y circunscribible al cómic costumbrista, sin que por ello una revisión a posteriori nos descubra novedosos pequeños detalles que pudieran llegar a despertar en nosotros esa chispa de pasión. Con esa querencia por las vidas cruzadas que Robert Altman puso de moda en la gran pantalla, en este Sacha se nos cuentan tres historias que acaban siendo una, con tres grupos de personajes que ven como sus circunstancias acaban unidas.

En lo argumental podemos encontrar lugares ya visitados en M Jean, pero como dije antes, también podemos ver un avance, un ir más allá y no quedarse en esa exploración de la clase media francesa, concentrándose más bien en una observación del día a día de nuestras sociedad. Introducir un grupo de gatos callejeros como protagonista de uno de los capítulos, unido a las escenas oníricas, le dan un toque de fantasía y frescura tan demandado por los seguidores de D&B. Pero realmente, donde se da el gran cambio, es en la parte gráfica, en riguroso blanco y negro, con un estilo mucho más suelto e inmediato sin que por ello se pierda esa calidez y amabilidad tan característica de D&B. Un Berberian que se introduce en los caminos del ejercicio de estilo, pero sabiendo en todo momento por donde debe transcurrir la historia, sin olvidarse de volver a ella y lo que es más importante, sin permitir que el lector pierda el interés sobre la misma.

Un tebeo que invita al optimismo y que nos deja entrever lo que en un futuro estos autores puedan llegar a ofrecernos. Es innegable que estas obras en solitario les están sentando de maravilla y sólo queda que cojan las suficientes fuerzas para regalarnos otra obra a la altura de su mejores momentos.

3 comentarios:

álvaro ortiz dijo...

la historia me ha gustado mucho, pero lo que realmente me ha flipado ha sido el dibujo

aunque lo de estilo inmediato no lo tengo tan claro, parece que está hecho así de manera espontánea, pero está todo muy medido ( creo )

hay páginas que me han dejado babeando!

pordiós, si vuelven a hacer otro señor jean, que no les dejen pasarlo a tinta, que así en lápiz está muuuuucho más bonito

BD! dijo...

Pues yo creo que más que lápiz, está hecho a plumilla quemada para que parezca lápiz. Pero vamos, tu sabrás más de eso

álvaro ortiz dijo...

ummmm, no sé, igual me equivoco pero me da que es lápiz

qué ganas de leer el de meteor slim, que aunque por ahí leí críticas malas hacia los 5 narradores, a mi ese ya me gustó bastante